La extorsión en Centroamérica genera un impacto económico y social que afecta a todos los sectores de la sociedad e incluso, en ocasiones, empuja a las personas a abandonar sus hogares y sus fuentes de ingresos.

El sector privado no queda exento y, cuando es víctima de este delito, debe incrementar los costos y las estructuras de operación para generar los bienes o los servicios que ofrece al público y para absorber las consecuencias de este delito. La falta de datos oficiales rigurosos, confiables y actualizados supone un obstáculo para prevenir y abordar este fenómeno. En este informe se analiza el impacto económico de la extorsión, sus efectos en la gestión de los negocios y las estrategias de protección que adoptan las empresas para no ser víctimas de este delito.

Claves

  • El sector privado es objeto de extorsiones sistemáticas por parte de maras, pandillas e imitadores, lo que dificulta su capacidad de crecimiento comercial y de oferta de empleo.
  • Las estrategias de protección frente a la extorsión han sido implementadas a partir de las experiencias individuales de las víctimas. Es necesario sistematizar y estandarizar protocolos de atención a las víctimas para minimizar los posibles daños físicos, psicológicos y patrimoniales causados por la extorsión.
  • El aumento de la extorsión provoca competencia desleal y extorsión cruzada, para disminuir la competencia en el mercado. Es primordial que exista más información sobre las extorsiones en el sector privado, para poder establecer alianzas público-privadas y articular estrategias que entiendan el nivel de la amenaza y atiendan adecuadamente este fenómeno criminal.

Sign up to the GI-TOC Observatory in Central America (CAM-Obs) mailing List